El gran amor que nos une

Este es el amor que será revelado en el futuro último…

 

Enseñó Rebe Najman de Breslov…

 

Existen dos clases de amor: uno es “el amor dentro de los días”, o sea, dentro de medidas. Ese es el amor de Hashem a nosotros en acción. Pero también está el amor en potencia, el amor que existió entre el Pueblo Judío y su Padre Divino incluso antes de la Creación, cuando el pueblo judío únicamente existía dentro de la mente de Dios. Ese es el “amor dentro de la mente”, y por ahora no podemos realmente entenderlo, ya que trasciende todo el tiempo y todas las medidas, y no se enviste en ninguna investidura. Pero este es el amor que será revelado en el futuro último

Existen dos clases de amor: uno es “el amor dentro de los días”, o sea, dentro de medidas. Ese es el amor de Hashem a nosotros en acción. Pero también está el amor en potencia, el amor que existió entre el Pueblo Judío y su Padre Divino incluso antes de la Creación 

 

Likutey Moharán I:23

¿Qué significa esto para mí?

 

A mí me gusta siempre pensar en el “amor dentro de los días” como lo que convencionalmente se denomina “amor condicional”. La Torá deja bien en claro que con Dios tenemos una relación condicional: Él tiene ciertas expectativas de nosotros y Él se compromete a que seamos Suyos y a atender nuestras necesidades. La maternidad me enseñó muchas lecciones acerca de lo “condicional” en mi relación con mis hijos, y también que mi amor por ellos posee un aspecto oculto que no está limitado por las “medidas” del amor condicional. En mi rol de madre, la relación revelada suele seguir el modelo de “Yo hago esto para ti; tú haces eso para mí”. Y eso contiene una cuota de verdad. Pero el amor que siento por mis hijos contiene una verdad oculta mucho más profunda, que es que los amo de manera absoluta y eterna y que estamos unidos por siempre, porque ellos son parte de mí, y que no hay nada que ellos hagan o dejen de hacer que sea capaz de hacer que mi amor disminuya. Para mí, eso es “amor dentro de la mente”.

 

Una plegaria

 

Que siempre sienta que soy parte de Ti, Dios mío querido;

Y que atesore el gran amor

Que tienes por nosotros, Tus hijos.

Tú nos elegiste y nos criaste.

Tu amor hacia nosotros se disfraza de mitzvot

Que nos unen a Tu santidad.

Tu amor es un amor verdadero, sin límites,

Infundido en la Torá y en las mitzvot

Que Tú nos diste a través de Moisés, nuestro maestro.

Por favor, ayúdame a cumplir con Tu voluntad

Con ferviente deseo

Para que sepa reconocer el verdadero amor

Que has ocultado en Tu Torá.

Dios mío, el gran amor que hay entre nosotros

Trasciende todo tiempo y todo espacio