Superando el dolor

El Gehennom (infierno) que es este mundo, el sufrimiento que muchos soportan – podremos elevarnos por encima de todo ello obligándonos a ser felices…

Enseña el Rebe Najman: La gente dice que hay dos mundos. Este mundo y el Mundo Venidero. Todos creemos que hay un Mundo Venidero. Este mundo también puede existir en alguna parte. Sin embargo, con todo el sufrimiento que vemos en el mundo y lo que la gente debe soportar, ¡donde estamos ahora seguramente debe ser el Gehennom! (Likutey Moharan II, 119). Reb Noson le dijo a uno de sus seguidores: “Si fueras constantemente feliz, no verías el Gehennom” (Kojavey Or, p. 78). El Gehennom que es este mundo, el sufrimiento que muchos soportan – podremos elevarnos por encima de todo ello forzándonos a ser felices (ver “El Jardín de las Almas” donde esto se explica con más detalle).

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Una vez, en un Día Intermedio de Pésaj, un joven se acercó a Rabi Abraham Sternhartz para hablar con él sobre las enseñanzas del Rebe Najman. Como el joven se había interesado recientemente en el Jasidut de Breslov, Rabi Avraham habló con él largo y tendido. Al final de la conversación, Rabi Abraham miró al joven jasid y vio lo triste y preocupado que estaba. El joven comenzó a contarle todas las dificultades y la oposición que estaba enfrentando desde que se había vuelto jasid de Breslov.

La gente dice que hay dos mundos. Este mundo y el Mundo Venidero. Todos creemos que hay un Mundo Venidero. Este mundo también puede existir en alguna parte. Sin embargo, con todo el sufrimiento que vemos en el mundo y lo que la gente debe soportar, ¡donde estamos ahora seguramente debe ser el Gehennom!

Este mundo también puede existir en alguna parte. Sin embargo, con todo el sufrimiento que vemos en el mundo y lo que la gente debe soportar, ¡donde estamos ahora debe ser el Gehennom! (Rebe Najman).

Rabi Avraham le dijo: “¡Nu! Hoy es Pésaj, la época de nuestra redención”, y comenzó a hablarle de la grandeza de Pésaj, del Éxodo y del verdadero significado de la libertad. Le dio muchos consejos y mucho ánimo para ayudarlo en esos momentos difíciles. Al final de la conversación, Rabi Avraham le dijo: “PeSaCH tiene el mismo valor numérico que [Rabi] NaCHMaN (148). ¿Cómo podemos relacionar a Rabi Najman con los conceptos de Pésaj? La Hagadá nos lo enseña: ¡Esto es lo que hizo Hillel! Tomó el Pésaj, la Matzah y el Maror, y comió todo junto”.

Si estuviéramos alegres, no sentiríamos la amargura del sufrimiento…

Él le aconsejó a este joven que aceptara la enseñanza de Hillel. Podemos participar del Pésaj – el Verdadero Tzadik – sólo experimentando la amargura y la dificultad. Entonces podremos apreciar plenamente estas enseñanzas. “Ahora”, dijo Rabi Avraham, “¡vete a casa y ten un Pésaj muy alegre!” (La Hagadá de Breslov p. 54).

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Si estuviéramos siempre alegres, no sentiríamos la amargura del sufrimiento y no nos pesarían todos los problemas de la vida. Esto no es ni fantasioso ni irreal. Es simplemente que sabemos que, a veces, no podemos hacer nada con respecto a nuestra situación, excepto rezar. En lugar de revolcarnos en la tristeza, podemos elevarnos por encima de ella y sacar lo mejor de ella. Las cosas con el tiempo solucionarán. Así, enseña el Rebe Najman: La alegría abre el corazón (El libro Aleph-Bet, Alegría A:2).

• Cruzando el Puente Angosto, capítulo 3