Dame otra oportunidad

Dame otra oportunidad, una posibilidad de redención. Sé que he pecado, no hay secretos entre nosotros y Tú sabes perfectamente cuantas faltas he cometido con o sin intención.

 

A veces me he dado cuenta y he seguido adelante con un simple “perdóname HaShem”, como si yo pudiera darte órdenes. Otras veces ni siquiera eso, mi orgullo alimentado por el yetzer hará me ha convencido de que no hacía falta disculparse, que no era para tanto, que al fin y al cabo estoy ocupada o distraída o cansada… siempre hay una excusa.

 

Ahora Te pido desde el fondo de mi corazón: perdóname Di-s mío por todas las faltas que he cometido. Tanto por las pequeñas como por las no tan pequeñas, disculpa la falta de atención en el rezo, incluso la falta de rezos.

A veces me he dado cuenta y he seguido adelante con un simple “perdóname HaShem”, como si yo pudiera darte órdenes. Otras veces ni siquiera eso

Perdóname por ser desagradecida, por no valorar lo suficiente mi casa, mi familia, mi hogar. Perdona que siempre tenga una palabra para pedirTe algo que a mi juicio me está faltando y que no siempre va seguida del agradecimiento por todo lo que me has concedido en la vida.

 

Veo lo que me falta pero estoy cegada ante lo que ya tengo. Tengo vista de águila para divisar el bonito vestido en la tienda pero soy miope para ver todos los que están colgados en mi armario.

Pienso en las restricciones derivadas de la pandemia y pierdo el sueño pensando cuándo terminará todo esto, pero no se me pasa por la cabeza agradecerte por no haber enfermado ni haber tenido a ningún familiar enfermo. Es cierto que a mis familiares no les puedo ver por el momento, pero sé que están sanos y eso debería bastarme para agradecerte el día entero.

 

Como bien sabes y me conoces desde que me creaste, tengo defectos, muchos, pero también sé que eres Misericordioso, Bondadoso, Tardo para la ira, Omnipotente y Comprensivo a la vez. Por eso me atrevo a pedirTe de nuevo algo más, perdóname por mis pecados, permíteme vivir otro año más con salud, con parnasá, con shalom bait, con tranquilidad en el alma. Dame la oportunidad de aumentar mi familia, de enmendar mis errores y concentrarme en la tefilá y en mis quehaceres. Permite que me haga más cercana a Ti y que cumpla más mitzvot y sobre todo permíteme hacerlo con genuina y auténtica felicidad.

 

Ya ves, de nuevo pidiendo pero también agradeciendo por este año lleno de pruebas, desafíos, alegrías y tristezas. Gracias por un año más de vida.