Shavuot – Alegría y aceptación del regalo de la Torá
*El Rebe Najman nos enseña cómo estar presentes en el momento, especialmente durante los zmanim sagrados como el sagrado Yom Tov de Shavuot. Durante casi siete semanas, hemos estado contando el Omer (desde la segunda noche de Pésaj).
Durante los 49 días del Omer, lo que estamos haciendo en realidad es recorrer las 49 puertas de la teshuva. Al contar, nos purificamos y volvemos a Hashem con amor y temor. Estamos regresando a Hashem mientras contamos. Nos concentramos en estar presentes en este viaje tan especial que nos transporta rumbo a Shavuot.
Contamos día a día: Hoy es un día del Omer, hoy son dos días del Omer, y así sucesivamente. Cuando lleguemos a Shavuot, habremos llegado a la puerta número 50. Rebe Najman explica que la puerta 50 es la propia teshuva de Hashem. Es cuando Hashem regresa a nosotros. Es un retorno y una restauración. Hemos hecho todo ese trabajo, contando diligentemente el Omer, trabajando en mejorar nuestras middot, nuestros rasgos de carácter, con el corazón quebrantado por las veces que hemos herido a otras personas o las veces que nos dejamos alejarnos de Hashem. Pero en Shavuot es cuando Hashem vuelve a nosotros.
En Shavuot, tenemos un vínculo especial con Hashem, único en la historia de la Creación. Nos referimos a esta experiencia de unión como zman matan Torá, el momento en que Hashem nos da la Torá. Es una unión muy poderosa entre nosotros y Hashem.
Contamos día a día: Hoy es un día del Omer, hoy son dos días del Omer, y así sucesivamente. Cuando lleguemos a Shavuot, habremos llegado a la puerta número 50
Lo que sucede en Shavuot es que aceptamos la Torá como si estuviéramos en el Monte Sinaí cuando se entregó la Torá por primera vez. La estamos recibiendo en el presente. La estamos aceptando literalmente hoy.
Esta entrega de la Torá es el mayor acto de amor. Cuando una persona da algo y la otra lo recibe con amor y agradecimiento, eso forja una relación más profunda, más rica y más alegre. Cuando Hashem nos da la Torá y nosotros la recibimos con asombro, amor y agradecimiento, estamos co-creando una intensidad de conexión que no tiene parangón. Nos estamos soldando con Hashem. Es un vínculo de alegría y asombro del que cada uno de nosotros es capaz, siempre y cuando esté dispuesto a llevar a cabo el trabajo.
Rebe Najman nos dice que es muy importante vivir todas las fiestas con alegría. Lo que sucede en cada fiesta, incluyendo Shavuot, es que todas las mitzvot que hacemos a lo largo del año se reúnen. Es como si se juntaran todas formando un ramo fragante para traernos a nosotros y a Hashem la dulce fragancia de la alegría en el Yom Tov.
Que tengas un Shavuot inspirador y lleno de alegría. Jag sameaj!
*Basado en LM 56
