Puertas cerradas, ventanas abiertas

Enseñó Rebe Najman…

De las cartas de Reb Noson: “Incluso cuando las puertas están cerradas con llave por cada costado y por cada rincón, por lo que uno podría pensar erróneamente que ya no queda esperanza, Di-s no lo permita, yo sigo teniendo fe en que queda mucha esperanza. Porque la capacidad de Di-s de enviar alivio y salvación es muy grande y Su poder de salvación es inagotable”.

Hojas que curan el alma

Incluso cuando las puertas están cerradas con llave por cada costado y por cada rincón, por lo que uno podría pensar erróneamente que ya no queda esperanza, Di-s no lo permita, yo sigo teniendo fe en que queda mucha esperanza. Porque la capacidad de Di-s de enviar alivio y salvación es muy grande y Su poder de salvación es inagotable.

Qué significa esto para mí?

Rebe Najman enseñó una lección muy breve que quedó registrada en el final de la primera sección del Likutey Moharán, en la cual él establece un principio de vida fundamental que, en lenguaje moderno, se traduce como “Dios no cierra una puerta hasta que no abre una ventana”. Por supuesto, él toma la frase prestada de una fuente mucho mejor, del mismísimo Rey David, quien ciertamente sabía lo que es vivir una vida llena de dificultades y tropiezos. Dice el Salmista: “Cuando estaba en problemas, Tú me ensanchaste el camino”. En hebreo, “problemas” se dice tzaar, que de hecho significa “estrechez”. O sea, “Cuando estaba en un lugar estrecho, Tú me abriste el camino”.

Dentro de cada situación de confinamiento, siempre hay aperturas. Y él culmina la lección con un mensaje de esperanza: “Además de esperar que Di-s nos libere muy pronto de todos nuestros problemas, incluso estando en medio de la dificultad, ¡Dios siempre nos da un respiro!”.

Una plegaria

Amo del universo, Lleno de compasión,

Ayúdame a abrir los ojos, el corazón y la mente

Para que siempre pueda ver la bondad y el alivio que Tú me das

Incluso en medio de los problemas

Esto solo ya me ofrece un respiro en medio de tantas presiones

Que enfrento: físicas, y espirituales

Que me hacen sentir que no tengo escapatoria….

Si tan sólo pudiera sentir y ver todo lo que Tú haces por mí

Me alegraría con todo el corazón y rebosaría de gratitud

Y no dejaría de darte las gracias por todo

Y no dejaría de clamar ante Ti por todo lo que aún no he logrado

Likutey Tefilot I:333