Pensando en el Tzadik

The Mindset of Faithfulness

La hermosa silla de Rabi Najman fue hecha por el shojet (matarife ritual) de Teplik. Cuando le entregó su regalo al Rebe, este se puso muy contento. Rabi Najman le preguntó: “¿Cuánto tiempo te llevó hacer la silla?”.

“Trabajé en ella una hora al día, durante seis meses”, respondió el shojet.

Rabi Najman quedó impresionado y satisfecho. “Pensaste en mí todos los días durante una hora….”.

Los Bresloveros de antaño, en Uman, solían decir que si la persona piensa en el Rebe todos los días, tarde o temprano comenzará a poner en práctica las enseñanzas del Rebe. Cuando eso suceda, se acercará aún más a Rabi Najman.

Esa es una de las lecciones de la historia “Los Siete Mendigos”. Cada vez que los novios anhelaban a un mendigo en particular, este aparecía.

Curiosamente, el Arizal le dijo a su principal talmid (alumno), el rabino Jaim Vital zal, que todos los logros espirituales que Rabí Jaim iba a alcanzar (como transmitirle al mundo los escritos del Arizal) se debían al gran anhelo que tenía el Rabino Jaim de aprender cada vez más del Arizal. Esto hizo que la neshamá (alma) del Arizal ayudara a Rabí Jaim a cumplir su avodá (devociones espirituales).