Página principal JudaismoConsejos practicos Vivir el presente

Vivir el presente

Autor: Davy Dombrowsky
image_print

¿Por qué una persona va a querer estar enojada más tiempo del necesario?

La vida a veces puede ser una montaña rusa. Dicen que cuando llueve, diluvia. Y yo siento que cuando los obstáculos y los desafíos se van amontonando, mis pensamientos me hacen tropezar. Siento que quiero darme por vencido y hundirme en la negatividad demasiado tiempo.

En Pirkey Avot 5:11 hay una Mishná que habla de las cuatro clases de temperamentos que tiene la gente. Hay quienes se enojan con facilidad; otros que tardan en enojarse; otros que son fáciles de calmar después de que se enojaron y otros que son muy difíciles de apaciguar.

Por favor, Hashem, ayúdanos a librarnos de todos los pensamientos negativos.

Yo siento que cuando tambaleamos entre los pensamientos negativos, somos como ese tipo que está de mal humor y que no se calma con nada. Casi como el hombre empedernido y furioso que quiere sumirse en la ira porque piensa que se merece estar enojado mucho tiempo debido a lo que le sucedió. Y que, si se da permiso para sentirse mejor, entonces las malas cartas que recibió van a ser menospreciadas. Pero ¿por qué una persona va a querer estar enojada más tiempo del necesario? ¿Verdad que se sentiría mucho mejor si se sacara de encima el enojo? Esto es obviamente una trampa que la mente (alias “el Otro Lado”) le está jugando. La mente trata de convencernos de que nos vamos a sentir mejor si seguimos enojados y el ego se deja engañar.

En Shivjei Harán (Alabanzas del Rebe Najman), el pequeño libro escrito por el Reb Noson acerca de la grandeza del Rebe Najman, se cuenta de la lucha que libraba el Rebe para servir a Hashem. “Él empezaba de nuevo cada día; o sea, a veces, cuando caía de su nivel anterior, no se daba por vencido. Simplemente decía: ‘Voy a volver a empezar como si jamás hubiese servido a Hashem en toda mi vida. Ahora recién estoy empezando a servirlo por primera vez’. Y así sucedía cada vez. Siempre empezaba de nuevo. ¡Él estaba acostumbrado a empezar de nuevo varias veces por día!” (6).

Este nivel me parece algo increíble. ¡Esto es algo sumamente difícil de lograr! Hace falta una dureza mental tremenda para volver a empezar de cero, como si nunca antes hubieras empezado y fuera la primera vez.

Yo siempre admiré a los atletas profesionales que logran acceder a esta memoria a corto plazo. Cuando el lanzador se posiciona en el montículo y les hace dos home runs consecutivos a los dos primeros bateadores, pero entonces vuele a la normalidad y durante el resto de juego lanza luces apagadas, eso me causa gran impresión. O cuando un jugador está jugando y tiene todas las de ganar y la primera mitad le va mal pero entonces domina en la segunda mitad, eso demuestra que logró presionar el botón de “nuevo comienzo”. Esto es algo que vale la pena practicar. Mucho de nuestro caer y quedarnos abajo se debe a que le damos demasiado crédito a lo que pensamos. Pero fácilmente podemos ser más como el Rebe Najman y dejar ir el pasado, sin tratar de arreglarlo todo obsesivamente. Tenemos que enfocarnos en le presente y dejar que las ondas positivas que naturalmente fluyen de Hashem nos llenen la mente, para que podamos seguir avanzando otra vez con alegría.

Por favor, Hashem, ayúdanos a librarnos de todos los pensamientos negativos. Por favor, llénanos la mente con ideas positivas y acalla nuestro ego, de modo que podamos sentir Tu Presencia y no quedarnos varados en la tristeza. ¡Amén!

 

Publicado originalmente en Halalel Davar

Artículos relacionados