¿Qué es más grande que la sabiduría?

אמונה פשוטה, זה הכל

“Cada persona debe dejar de lado todas sus ideas sofisticadas y servir a Dios con sencillez e inocencia. Porque los actos de la persona deben ser más grandes que su sabiduría”. -Rebe Najman de Breslov

 

Para algunos, esta es una de las enseñanzas más sorprendentes de la filosofía de Breslov. La sencillez y la inocencia no son algo lleno de “glamour”. Y no son muy atractivas para cierto tipo de personas brillantes, aquellas cuya mente es un terreno de juego natural para las travesuras intelectuales.

 

El hecho de que debamos servir a Hashem con sencillez y que nuestros actos sean más grandes que nuestra sabiduría, también es un reto para aquellos cuyo servicio a Hashem se compone de complejas devociones psicoespirituales y materiales. Aquellos a los que se les ha enseñado que la vida es un asunto serio (lo es) y que, si no están en un estado constante de sufrimiento, luchando bajo la aplastante carga de servir meticulosamente a Hashem, entonces su servicio es defectuoso (no lo es. Eso es mentira).

 

Esta enseñanza también puede desconcertar a los buscadores sinceros que están dando sus primeros pasos en el servicio a Hashem. Estan personas tienen muchas preguntas sobre qué camino seguir.  ¿Acaso rezar con florituras coreografiadas complace o impresiona a Hashem?  ¿Acaso asistir a una clase de Kábala que nadie (ni siquiera el profesor) entiende, es un boleto a la redención? ¿Es opcional el simple hecho de cumplir las mitzvot, ya que, después de todo, la Jasidut de Breslov suele hacer hincapié en el trabajo interior, como la fe y la alegría?

El hecho de que debamos servir a Hashem con sencillez y que nuestros actos sean más grandes que nuestra sabiduría, también es un reto para aquellos cuyo servicio a Hashem se compone de complejas devociones psicoespirituales y materiales

Por supuesto, la respuesta breve a las preguntas anteriores es “no”, porque la simplicidad y la inocencia requieren de la verdad. Y si hasta ahora has pensado que la respuesta era “sí”, no pasa nada, porque el cambio es posible. El presente no es lo mismo que el pasado. Lo que sea que haya sucedido en el pasado es ciertamente la voluntad de Dios, pero tu libre elección personal comienza ahora. En este mismo momento.

 

Rebe Najman nos dice: Siempre puedes empezar de nuevo.

 

La gente nunca cambia… ¿O sí?

La neuroplasticidad (la capacidad del cerebro de reorganizarse mediante la formación de nuevas conexiones neuronales a lo largo de la vida), es uno de los conceptos científicos más apasionantes que han alcanzado las enseñanzas de Rebe Najman. Cada una de las lecciones de Likutey Moharán ofrece una herramienta o enseñanza que puedes utilizar para reorganizar la mente. La clave de esta revisión es tu ratzón, o sea, tu voluntad o deseo. Si deseas cambiar, elegirás cambiar. Si eliges cambiar, es muy probable que lo hagas.

Si hasta ahora has creído en una idea que te restringe, eres libre de desechar esta creencia limitante. Si eliges cultivar un amor por Hashem que sea más fuerte que tu autoimagen y tu orgullo, empezarás a cambiar la forma en que tu mente y tu corazón se comunican.

 

Puede que no seas capaz de cumplir todas las mitzvot con una meticulosidad intensiva y mantenerte veraz y humilde, pero puedes cumplir las mitzvot con amor, si no tienes miedo de bajar un poco tus defensas y concentrarte en lo que realmente importa. (Incluso si pareces un poco tonto -y todos parecemos un poco tontos, algunas veces).

 

El Rebe Najman dice que incluso deberías estar dispuesto a “revolcarte en todo tipo de suciedad” para complacer a Hashem y hacer Su Voluntad. Cuando tu amor por Hashem es tan fuerte que estás dispuesto a renunciar a tu honor, a tu estatus social e incluso a tu popularidad; cuando estás dispuesto a dejar de lado las ideas de tu intelecto y seguir la sabiduría del Tzadik, ahí es cuando te espera un gran regalo.

 

Rebe Najman nos habla de este regalo: Hashem te valorará como un Rey valora a su hijo. El Rey te abrirá las puertas de Su tesoro, un depósito de preciosos conocimientos. Estos conocimientos te permitirán alcanzar un nivel superior de elevación espiritual.

 

Basado en Likutey Moharan II, Torá 5:18