Para aquellos que han estudiado en Yeshiva, sólo el sonido de la palabra Elul es suficiente para sentir un escalofrío por toda la columna vertebral. Se dice que, en los días de antaño, cuando se anunciaba el mes de Elul en las comunidades de toda Europa (en el Shabat precedente), muchos incluso se desmayaban del miedo.
Si echamos un vistazo rápido a las leyes y costumbres relativas a Elul, aprendemos que debemos recitar más Tehilim, abstenernos de ciertas actividades que, aunque permitidas, dependen de ciertas indulgencias, y varios otros preparativos serios y a menudo difíciles para el Día del Juicio que se aproxima.
Sin embargo, la mayoría nos sentimos lejos de la seriedad de estos días. Además, los preparativos requeridos y el “estado de ánimo” esperado pueden hacer que nos sintamos negativos respecto a estos días. ¿Acaso este es el enfoque adecuado? ¿Qué enseña Rebe Najman sobre cómo arrepentirse?
Todas las costumbres y sentimientos judíos asociados a este mes son ciertamente loables e importantes. Sin embargo, hay un concepto erróneo general relacionado con ellos y con el concepto general de Teshuva (arrepentimiento) que demos destacar.
Si echamos un vistazo rápido a las leyes y costumbres relativas a Elul, aprendemos que debemos recitar más Tehilim, abstenernos de ciertas actividades que, aunque permitidas, dependen de ciertas indulgencias, y varios otros preparativos serios y a menudo difíciles para el Día del Juicio que se aproxima.
Rebe Najman enseñó que la depresión y la tristeza están absolutamente prohibidas. El Rebe era famoso por decir: “Es una gran mitzvá estar siempre feliz”. Pero la gente olvida que también dijo: “¡Es un gran pecado estar deprimido!”. Uno debe ser extremadamente cuidadoso en asegurarse de que cualquier acto extra o exigencia se haga sólo en un ambiente de alegría. La tristeza y la depresión son los polos opuestos de la teshuva (retorno a Dios). Pero si esto es así, entonces ¿cómo explicamos los ejemplos de seriedad de Elul mencionados anteriormente?
Debemos hacer una distinción entre lo que es el corazón roto y la depresión. Mientras que la depresión es muy negativa y nos aleja de Dios, el corazón roto es la verdadera expresión de un corazón judío sano. De hecho, se dice que nada es tan completo como un corazón judío roto. A los judíos de antaño les resultaba mucho más fácil conectarse con esta expresión y por esta razón, leemos sobre sus muchas costumbres y sentimientos durante el mes de Elul.
Si bien el corazón roto es algo muy apropiado durante estos días, debemos tener mucho cuidado y ser conscientes de que podemos caer rápidamente en la tristeza. Es necesario esforzarse cada día no sólo en hacer Teshuva, sino también en permanecer en un estado de ánimo tranquilo y alegre. Es cierto que las leyes de la teshuva incluyen hacer un recuento de nuestras acciones y arrepentirnos de nuestros pecados; sin embargo, la esencia de la teshuva es simplemente volver a Dios desde dondequiera que estemos. No se trata de un proceso mecánico, en el que nos limitamos a señalar nuestros pecados, o a tratar de forzarnos a sentirnos mal. El reconocimiento de nuestras acciones erróneas es en realidad una llamada de atención, que nos recuerda las áreas de nuestra vida espiritual que necesitan una verdadera rectificación. Aquí es donde entra en escena el verdadero “trabajo”.
SÍ, debemos tratar de mejorar en estas áreas pero también debemos darnos cuenta de que este es un proceso largo. Sólo acabamos de comenzar. Incluso en el Mundo Venidero, estaremos constantemente haciendo Teshuva. La Teshuva es nuestro eterno proceso de curación, no un deprimente vendaje anual.
Sobre todo, esto debe ser visto como un maravilloso regalo que nos hace Dios. Él nos está llamando, informándonos que desea una relación sana y vibrante con nosotros. Sólo tenemos que hacer un balance de nosotros mismos. Debemos ver esto como una increíble y alegre oportunidad; nos estamos preparando para una relación muy especial con el Amo del Universo. ¿Qué mejor que esto?