En la sección de la Torá de Lej Leja, Hashem le dice a Abraham “Sal, de tu tierra, de tu lugar de nacimiento y de la casa de tu padre. Ve a la tierra que te mostraré”.
Reb Noson explica el significado más profundo de estos versículos. Nos dice que Lej Leja significa literalmente “vete a ti mismo”. Dondequiera que vayas, ve a tu verdadero yo, el lugar interior donde puedes ser realmente tú. En ese lugar profundo e interior puedes expresarte con verdadera verdad y sinceridad. Pero para encontrar ese verdadero yo interior, cada uno de nosotros tiene que dejar atrás nuestra tierra, nuestro lugar de nacimiento y la casa de nuestro padre.
Lej Leja significa literalmente “vete a ti mismo”. Dondequiera que vayas, ve a tu verdadero yo, el lugar interior donde puedes ser realmente tú.
Nuestra tierra es nuestro deseo de cosas materiales, empezando por el dinero. Es nuestro materialismo.
Nuestro lugar de nacimiento es nuestros antojos físicos y los deseos del cuerpo.
La casa de nuestro padre representa nuestra ascendencia, que simboliza nuestros pensamientos y el deseo de ser honrado por los demás.
Estos tres tipos de deseos nos impiden encontrar, expresar y vivir nuestra verdad, que es la verdad del alma. El dinero, los antojos físicos y el intenso deseo de respeto y honor nos impiden ir a la tierra que Hashem nos mostrará. Esta tierra es la tierra de la expresión espiritual pura y la santidad. Esta es la tierra en la que eres capaz de vivir de una manera que es verdadera y sincera con lo que realmente eres. Esta es la tierra en la que puedes conectarte con Hashem y servirlo de verdad.
Que tengas un día en el que realmente puedas sentir, expresar y vivir la verdad de tu alma.
