La audacia de santidad

Podemos realmente abrir el corazón ante Hashem y contarle todos nuestros miedos

 

El Rebe Najman recomienda que cultivemos el rasgo de azut dikedushá, la audacia de santidad. Este rasgo se manifiesta de distintas maneras. Se manifiesta cuando les expresamos a nuestros mentores espirituales lo que pensamos y lo que sentimos.

 

Si tenemos a alguien que nos guía, es fundamental que seamos capaces de hablar sin sentir vergüenza. Deberíamos poder hacerle preguntas e incluso contarle nuestras preocupaciones y nuestras dudas. Podemos preguntarle cómo podemos corregir y reparar los problemas graves que tenemos en la vida y qué camino deberíamos elegir para el futuro. Si sentimos vergüenza, no vamos a poder expresarnos con sinceridad y entonces vamos a quedarnos sin consejos que pueden resultar esenciales para nuestro crecimiento espiritual.

 

Algo innegable sucede cuando nos abrimos, cuando buscamos una guía. Encontramos las respuestas que buscábamos.

 

De la misma manera, podemos hacer nuestra sesión de hitbodedut con azut dikedushá. Podemos realmente abrir el corazón ante Hashem y contarle todos nuestros miedos, nuestras preocupaciones, incluso las cosas que nos dan vergüenza. Porque, aunque nos sintamos un poco incómodos, siempre podemos recurrir a esta “audacia de santidad” que llevamos adentro. Podemos mantenernos firmes y hablar, aunque resulte difícil.

 

Algo innegable sucede cuando nos abrimos, cuando buscamos una guía. Encontramos las respuestas que buscábamos. Tal vez no suceda la primera vez que hables con Hashem en una sesión de hitbodedut. Tal vez no ocurra tampoco ni la segunda ni la tercera vez. Pero si eres perseverante, finalmente vas a empezar a encontrar las respuestas a tus problemas, y paz en tu corazón.

 

¡Que tengas un día maravilloso, en el que puedas ser abierto, sincero y audaz!