Las mentiras que están camufladas detrás de medias verdades son las más peligrosas y esto es lo que sucede en muchas series basadas en la vida judía.
Juguemos un poco. Imagina que estás en casa tranquilamente jugando una partida a un juego de mesa con la familia. Es tu turno y la categoría de preguntas que te toca contestar es “Cine y TV”. ¿Qué series judías conoces?
¿Cuál sería tu respuesta? Seguro que conoces más de una serie y más de una película que trata sobre judaísmo, vida judía o que está situada en Israel.
Juguemos un poco. Imagina que estás en casa tranquilamente jugando una partida a un juego de mesa con la familia. Es tu turno y la categoría de preguntas que te toca contestar es “Cine y TV”. ¿Qué series judías conoces?
Una de las películas más conocidas tal vez sea “Ushpizim”, que es tradición ver en Sucot y es un referente del cine judío de todos los tiempos. En cuanto a las series, últimamente se han hecho muy conocidas varias series que han sido publicadas en Netflix y en otras plataformas en los últimos meses.
Entre estas series cabe mencionar Fauda, Shtisel o Unorthodox. Todas ellas han tenido mucho éxito, la acogida del público ha sido muy buena y usuarios del mundo entero han visto y seguido punto por punto cada una de estas y otras series que están alcanzando cada vez más popularidad.
Sin embargo, la imagen que dan de la vida judía, ¿es fiel a la realidad? Sabemos que hablamos de ficción cinematográfica, pero aún así hay ocasiones en las que la distancia desde la ficción hasta la realidad es demasiado grande.
El problema de esto es la imagen que se ofrece al mundo del judaísmo. Quien no sabe cómo se vive en una comunidad judía ortodoxa puede llegar a pensar que todo lo que sale en las películas es cierto. Y, la verdad, es que la realidad no se parece mucho a la ficción. Tal vez la caracterización de los personajes sea muy correcta pero las razones que llevan a tener esa vestimenta o a vivir de esa forma no se parecen mucho a la trama de los episodios.
La imagen que se ofrece de la vida judía en estas series y en algún que otro reality show que también se está haciendo famoso es difusa y, lo peor de todo, es que tiene tintes de realidad mezclados con una ficción dramática. Las mentiras que están camufladas detrás de medias verdades son las más peligrosas y esto es lo que sucede en estas series.
Vamos a tomar como ejemplo una escena de la serie Unorthodox en la que la protagonista rasura su cabeza antes de casarse. Es cierto que muchas mujeres jasídicas se cortan todo el pelo, se afeitan la cabeza cuando se casan. Sin embargo, no es un hecho traumático como se puede ver en esta serie, sino que es un motivo de alegría ya que la mujer se prepara así para su vida matrimonial. Es un acto con un profundo significado espiritual y cabalístico y no es una forma de maltrato a la mujer o algo que todas hagan en contra de su voluntad, como es lo que se pretende dar a entender en esta serie de moda.
En definitiva, hay que tener cierto criterio a la hora de elegir lo que vemos y, sobre todo, tener un punto de vista crítico ante lo que nos presentan en el cine, la televisión o en internet. Recuerda que el mundo cinematográfico basa su éxito en la ficción y en el dramatismo, no en su exactitud histórica o en su fiel retrato de la realidad.